3.12.08

Esperando a Alicia

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Un día yo fuí Alicia, sabes ?
Varios días pasé viviendo en un mundo que sentía no me pertenecía. Sentía que no era parte de él, más que debía aprender a vivir con él y en él, pues no habría otro.
Me sentía tan ajena ... T
an lejana.
Mas de alguna vez caminé por senderos amarillos... No precisamente en verano, quizás sí en los melancólicos otoños de aquella época. Me sentía extraña. Sentía que caminaba por caminar, que pensaba por pensar, sin rumbo, sin destino, sin razón alguna.

Un día fuí Alicia en un país de Maravillas... No comía hongos para crecer ni para parecer más pequeña, era más extraño aún, lo hacía sin necesidad de ellos, sin necesidad de pasteles, ni brebajes, ni galletas; mas la gente parecía verme igual, no parecía notar cambio alguno en mí. Había tantas orugas imprecisas a mi alrededor, me hablaban pero decían nada, había tantos conejos que so
lo deseaban apresurarme, había tantas Reinas que imponían normas, leyes, reglas tan inútiles... Había tantos gatos que a pesar de no estar, su sonrisa nunca se borró. Había tanta gente al final del camino, y yo ahí sin saber ya quien era, sin saber si era la misma del día anterior, sin saber si quería volver a ser la de antes o quería quedarme como estaba.
Un día, sin darme cuenta, sin recordar cuando, sin recordar cómo, ya no era más Alicia. No. Quien sabe en realidad, talvez seguía siendo Alicia, quizás solo había regresado de aquel país tan extrañamente maravilloso. Volvía siendo la misma de siempre, ya no crecía mas. Era tal cuál lo recordaba. No sé si fuí yo quien decidió, no se si fue el mundo, no se si fue la gente lo que me hizo seguir siendo niña. Nada perdí en aquel viaje, solo aprendí, solo decidí postergar la adultez, decidí regirme por mis propias reglas y escucharme, nunca dudar de mi instinto, solo actuar. Así hasta hoy.
Ahora solo espero a que Alicia venga por mí y me lleve nuevamente al País de las Maravillas. Pero no será hoy, no. Espero sea en mucho tiempo más, y para entonces tener tan arraigada a mí la inocencia, felicidad, fantasía y todo aquello que me hace ser la infantil persona que soy, que no lo pierda por nada en aquel viaje a la completa Madurez.

Demora Alicia, por favor, demora.-



 

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